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Contar con la suficiente potencia contratada en casa para cargar tu coche eléctrico es una consulta frecuente para los conductores. Ve sacando la calculadora que vamos a echar unos cálculos…
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Al comprar un coche eléctrico o híbrido enchufable, parece evidente que nuestra mayor preocupación va a ser dónde cargarlo. Es más, esa es la razón por la cuál muchos usuarios todavía no se atreven a dar el paso.
¿Qué potencia necesito para cargar un coche eléctrico? Keep calm, que hoy venimos a solucionar todas tus dudas acerca de la recarga del coche eléctrico en casa.
Sí, llevamos años leyendo que van a instalar miles de puntos de recarga públicos, pero la realidad es que los que mandan no siempre hacen sus deberes. Además, en términos económicos o de tiempo no resulta factible ir buscando cargadores por la calle, salvo emergencias.
Lo mejor que puedes hacer es instalar un cargador para coche eléctrico en tu garaje, ya sea comunitario o privado. Con esto reduces costes al cargarlo. También existen trucos para ahorrar al cargar el coche en casa. ¡Que ya tenemos bastante con los tiempos que corren!
Veamos qué potencia necesitas para cargar el coche eléctrico en casa sin disparar los costes mensuales ni dejarte el sueldo en ello.
Cómo calcular cuánto gasta tu coche eléctrico
Si vienes de un vehículo de combustión interna, sabrás que calcular el coste de llenar el depósito es muy sencillo. Basta con multiplicar los litros del depósito por el precio del combustible ¡Tan fácil como atarse los cordones! Pues tenemos una buena noticia, lo mismo ocurre con tu coche eléctrico.
Cuando recargas tu coche eléctrico desde un cargador doméstico y quieres calcular el coste, solo tienes que multiplicar el número de kilovatios-hora (kWh) consumidos por el vehículo por el precio del kilovatio-hora contratado. Recuerda que el precio del kilovatio-hora varía mucho de un proveedor de energía a otro.
Coste = N.º kWh x precio KWh contratado
Es importante elegir una tarifa ventajosa para cargar el coche en casa. Puedes optar por una tarifa “Bi-horaria” o “Tri-horaria”; o por una tarifa sin discriminación horaria. Veamos unos sencillos ejemplos para un coche que consume 17 kWh/100 km de media en un recorrido diario de 100 km. Así puedes hacerte una idea más realista:
1. Con una tarifa sin discriminación horaria
Por ejemplo, la tarifa ‘One Luz’ de Endesa, que es de las más baratas (0,2423 €/kWh en abril de 2022). Nos costaría cada recarga diaria 4,12 euros.
2. Con una tarifa con discriminación horaria
Por ejemplo, el ‘Plan Vehículo Eléctrico’ de Iberdrola (0,030 €/kWh en abril de 2022), que también es de los más baratos. Nos costaría 0,51 euros la recarga diaria si recargamos en las horas valle (las baratas, vaya).
¿Qué potencia necesito para cargar un coche eléctrico sin preocupaciones?
Ahora que ya tienes claro cómo calcular el consumo y la importancia de apostar por la tarifa de la luz más ventajosa, hablemos de potencias de carga. En nuestros hogares cada vez tenemos más aparatos electrónicos y, si los ponemos todos a la vez, podemos hacer saltar los plomos.
¿A quién no le ha dado por hacerse una pizza en el horno con la lavadora y el lavavajillas puestos? Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra. A veces la potencia que tenemos contratada no es suficiente para cubrir todas nuestras necesidades de urbanitas del S.XXI
¡Pero cuidado! Aumentar la potencia de carga puede salirnos muy caro.
La “buena noticia” es que el precio de aumentar la potencia de una vivienda está regulado. Es el mismo para todos, en toda nuestra geografía. Viene recogido en el Boletín Oficial del Estado y se abona a la distribuidora en la factura eléctrica:
- Precio de acceso: 19,70 euros por kW solicitado en la potencia contratada.
- Precio de extensión: 17,37 euros por kW solicitado en la potencia contratada.
- Precio de enganche: 9,04 euros como mínimo en instalaciones de baja tensión.
Lo que quizá no te guste tanto saber es que un aumento en la potencia también incrementa el coste de la tarifa eléctrica correspondiente a la potencia contratada de la comercializadora. Relax, no te rindas tan rápido, sigue leyendo…
Sin sudores fríos, ¿realmente necesitas aumentar la potencia?
Sabemos que, si queremos una velocidad de carga elevada, probablemente sea necesario aumentar la potencia del contador de electricidad para que no salten los plomos al cargar nuestro coche eléctrico. La pregunta del millón es: ¿necesito tanta inmediatez? No, en condiciones normales, la realidad es que no.
En esta vida las cosas hay que hacerlas con cabeza. La potencia de carga necesaria hay que elegirla como las publicaciones en redes sociales, con cabeza, que luego vienen las sorpresas.
Lo primero de todo es contratar la visita técnica de un electricista experto en recarga. Él te podrá informar acerca de si tu instalación eléctrica puede soportar un punto de recarga. Pregúntale, tú no te cortes.
¿Qué tipo de cargador elijo?
En el mercado dispones de cargadores domésticos con distintos niveles de potencia. Las más habituales son 3,7 kW y 7,4 kW en monofásico; y 11 kW y 22 kW en trifásico. Todos ellos utilizan corriente alterna (CA). Lo bueno es que la potencia que entregan se puede limitar.
Por ejemplo, un punto de carga de 7,4 kW puede limitarse a 1,4 kW; 1,9 kW; 2,3 kW; 3,0 kW; 3,7 kW; 4,6 kW y 5,8 kW. Si vas a cargar en horario nocturno con todos los electrodomésticos apagados, podrás cargar al máximo contratado y, si en un momento dado necesitas cargar durante el día, podrás bajar la potencia.
Otra opción muy recomendable, probablemente la que más, son los cargadores con gestión dinámica de la carga. Ellos mismos miden la potencia que está consumiendo cada electrodoméstico en cada momento y le suministran la potencia que queda disponible al cargador. La mejor forma de no aumentar la potencia y despreocuparte aprovechando al máximo los recursos disponibles.
No me líes, entonces, ¿Qué potencia necesito para cargar un coche eléctrico?
La potencia contratada debe cubrir tus necesidades energéticas, pero ir sobrados en este sentido incrementará el gasto innecesariamente. En general, la potencia utilizada por los equipos conectados a la instalación eléctrica debe ser inferior a la potencia contratada para que no salten los plomos.
Analiza las dimensiones del hogar, cuántos vivís en él, cuántos electrodomésticos tenéis, el tipo de calefacción… y decide si necesitas una potencia monofásica o trifásica. Valora también de cuántas horas dispones para cargar tu coche eléctrico. No es lo mismo necesitar el 100% de batería en una hora que el 50% en seis horas.
Saca de nuevo la calculadora, que vamos a echar cuentas. Pongamos un vehículo eléctrico que consume de media 20 kWh/100 km. Si recorremos 100 kilómetros diarios, al llegar a casa deberemos recuperar esos 20 kWh. Con un cargador de 3,7 kW (16A) de potencia, necesitaríamos 5,4 horas.
Y ojo, que en este caso se trata de un consumo elevado y unos cuantos kilómetros. Si por ejemplo recorremos 30 kilómetros, con el mismo cargador podemos recuperar toda la energía consumida en apenas dos horas. Como ves, en ambos casos podemos aprovechar las horas valle de una tarifa eléctrica.
En resumen…
Para calcular la potencia que necesitas, debes analizar qué electrodomésticos quieres conectar al mismo tiempo y sumar sus potencias. La mayoría de los hogares españoles tienen una potencia media contratada de entre 4 y 5 kW para su suministro eléctrico. Por lo tanto, con un cargador de 3,7 kWh y un poco de planificación, podrías evitar aumentar la potencia y reducir el gasto.
Sí, saber qué potencia necesito para cargar un coche eléctrico es como volver al cole: papel, boli, calculadora y a echar cuentas. Por suerte ya has visto que, con unos sencillos cálculos y un poco de organización, la potencia contratada en tu hogar puede ser suficiente para recargar tu coche eléctrico.
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